sábado, 21 de agosto de 2010

"Caviar para las bocas tristes"



La tarde ha caído
compañía canina.
Me siento, respiro, camino, camina.

Vamos de paseo con sonrisa fría;
la noche es nuestra, la decisión mía.
Bebemos, gastamos, lloramos de ira.
Nos vamos a casa.

Acompañados de caviar y velas pasamos las horas,
noches enteras de romper el hielo;
ambientes cargados, ya me entra el sueño.

Olores flotando, drogas de diseño,
güiskis baratos con sabor a viejo.

Mañana desnuda, ducha fría
empieza una historia que se repetía.


Valero